La prosperidad económica es un deseo natural en todo ser humano, este deseo puede ser más grande o más pequeño, es decir para las personas tendrá menor o mayor impacto en su nivel de satisfacción en la vida, pero para todos es relevante sin ninguna duda.
De acuerdo a la kabbalah todos venimos a trabajar espiritualmente en tres ejes principales: salud, dinero y relaciones, cada una de estas pueden presentar desafíos con el propósito de que cambiemos aspectos de nuestra expresión interna y externa en este plano terrenal.
Cuando existen desafíos recurrentes en el área de sustento material debemos revisarnos de manera muy profunda puesto que uno de los bloqueos más grandes que existen para recibir prosperidad es nuestro orgullo, y muchos me dirán “pero yo no soy orgulloso, siempre pido perdón”, no hago referencia a ese tipo de orgullo, me refiero al orgullo relacionado con sentirme la fuente de mi riqueza (existe una sola fuente: el Creador), me refiero al tipo de orgullo que hace que vea con desprecio a los demás, me refiero al tipo de orgullo que hace que quiera ser autosuficiente y jamás pida ayuda, entre otras expresiones de este atributo.
Cuando se dificulta que veamos dónde o cómo somos orgullosos, una buena forma de saberlo es preguntándole a una persona que nos conozca bien y que tenga la confianza para poder ser honesto frente a una pregunta como esta.
Aprender a recibir la respuesta que esta persona nos dé puede ser en sí mismo una señal de si somos orgullosos o no, porque a una persona orgullosa le cuesta mucho recibir feedback “negativo”, pero necesitamos saber para poder cambiar y disminuir este bloqueo de nuestra prosperidad.
Ahora vamos a hablar de otros posibles bloqueos de este flujo energético de dinero a la vida de las personas:
- Conceptos negativos acerca del dinero implantados por nuestra educación y entorno, ningún recién nacido tiene creencias limitantes activas de ningún tipo, todas son implantadas y activadas a lo largo de nuestra vida de distintas formas.
- Tener un comportamiento egoísta con el dinero que recibo, cuando no comparto, obstruyo el flujo y me lleno de miedo de perderlo.
- Falta de sentido de merecimiento causado por una baja autoestima o por las creencias limitantes del punto 1.
Recordemos tres cosas para activar el flujo del dinero en nuestra vida: trabajar honesta y profundamente en cultivar la humildad, la generosidad y el sentido del valor propio que como seres humanos tenemos, si trabajamos con constancia en estos tres frentes les puedo asegurar que poco a poco el flujo se irá restaurando.
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Te deseo mucha prosperidad y que seas un gran administrador de esta fuerza.
Patricia Jurado U.
Patricia es directora–fundadora de “Fundación Kabbalah Ecuador” e instructora. Desde sus plataformas comparte esta sabiduría, es pionera en la difusión del método de Kabbalah de Casa y la plataforma Ingenieria para el alma para Latinoamérica y Miami. Escribió 7 Principios Kabbalistas para educar a nuestros hijos, su podcast “Kabbalah es simple” tiene un gran público alrededor del mundo.
Síguela en: www.vivirkabbalah.com Instagram: @patriciajuradou, Google Podcast: Kabbalah es simple.
Se formó como conferencista con Ismael Cala en Miami, es ecuatoriana y madre de dos hijos.
