La oda al brillo.
He leído muchos posteos en redes sociales acerca de brillar y mujeres que brillan; pues, felicidades si sienten que eso les hace bien.
Una de las habilidades claves para una vida equilibrada es desarrollar la habilidad de ser un pensador crítico, buscar ir detrás de lo aparente y del discurso de moda que en muchas ocasiones solo crea inseguridades y más vacíos.
Esto debería propiciar algunas preguntas ¿se puede brillar de verdad y siempre, sobre todo si por dentro tengo baja autoestima?
Segunda pregunta: ¿el deseo de brillar constantemente no es precisamente una señal de una carencia de nuestra autoestima que no ha sido atendida ?
Tercera pregunta: ¿para qué deseo brillar?
Antes de responder a esta pregunta empecemos por darle contexto a brillar. Cuando algo brilla de manera fuerte y constante, usualmente lastima los ojos, opaca todo lo que hay a su alrededor y no permite que veamos con claridad; al contrario, puede hacer que nos confundamos en las formas que observamos creando caos a nuestro alrededor.
Tampoco me refiero a que tengamos que opacarnos para que otros se sientan bien, porque eso también nos aleja del equilibrio que buscamos y no nos haría sentirnos bien.
Me siento más identificada con la “posibilidad” (léase bien posibilidad) de iluminar como una vela. Una vela emite una luz constante, cálida, que no lastima ni nuestros ojos ni los ojos de los demás, sino que nos proporciona guía, es útil, nos permite avanzar sin tropezar.
La llama de una vela se puede compartir miles de veces para encender otras velas y no se ve disminuida.
Deseo de corazón para todos quienes me leen que se hagan estas preguntas y luego revisen algunas ideas de kabbalah acerca de la Luz interior y cómo se puede compartir:
- Indispensable sanar primero, sanar de verdad. Necesitamos sentirnos completos para poder ver nuestra propia Luz.
- Recuerden, nuestra Luz es eterna, nadie ni nada la puede apagar y no depende de la Luz de otros.
- Compártanla recordando que hay un solo brillo eterno en el universo y que es del Creador no nuestro.
- Que nuestra luz propia en el mundo debe mostrarse de manera cálida, balanceada y constante como una vela que ilumina y permanece iluminando sin necesidad de querer brillar para opacar a otros.
Cuéntame si estás en el proceso de encontrar tu Luz.
Patricia Jurado U.
Patricia es directora–fundadora de “Fundación Kabbalah Ecuador” e instructora. Desde sus plataformas comparte esta sabiduría, es pionera en la difusión del método de Kabbalah de Casa y la plataforma Ingenieria para el alma para Latinoamérica y Miami.
Escribió 7 Principios Kabbalistas para educar a nuestros hijos, su podcast “Kabbalah es simple” tiene un gran público alrededor del mundo.
Síguela en: www.vivirkabbalah.com Instagram: @patriciajuradou, Spotify: Kabbalah es simple.
Se formó como conferencista con Ismael Cala en Miami, es ecuatoriana y madre de dos hijos.