Con motivo del Día Mundial de la Familia, celebrado el sábado pasado, me puse a pensar si realmente sabemos amar.
Muchos de nosotros pensamos que es algo instintivo que brota naturalmente en un ser humano por su propia esencia, lo cual es correcto; pero entonces ¿por qué existen tantos y tan diversos problemas en las relaciones de pareja, familiares y de amigos, incluso?
La kabbalah explica que el amor es la fuente universal de todo lo que existe, evidentemente un amor diferente al que podemos experimentar aquí en este plano material; sin embargo, en cada uno de nosotros habita de manera potencial, pero muchos no sabemos cómo recibirlo para darlo. Efectivamente, la ecuación es recibir para dar, al contrario de como se nos ha enseñado: dar para recibir, que es el segundo paso de la ecuación.
Voy a explicarlo: ¿De quién recibimos amor? La respuesta es: de nadie externo a nosotros, el primer amor lo recibimos de nosotros mismos. De aquello que llamamos amor propio, una vez que este amor está plenamente afianzado —es decir, somos capaces de darnos amor, respeto, consideración, todo a nosotros mismos— entonces, desde ese lugar de auto estima saludable, podemos empezar a compartir amor con los demás. Cuando venimos de un lugar del cual buscamos recibir amor de afuera en primera instancia, el resultado es la frustración porque nadie sabe lo que para nosotros significa recibir amor. Debemos ser capaces de mostrárselo a través de nuestras acciones hacia nosotros mismos.
Lo mismo ocurre cuando queremos compartir amor, inocentemente pensamos que nuestra pareja, hijos o familiares tienen la misma forma de recibir amor que nosotros tenemos, pero esto es tan personal como la huella digital. Tenemos que observar, escuchar, sentir con mucha intención y atención para encontrar el punto correcto donde quien amamos puede recibir amor y de esta manera sentirse amado.
En síntesis, ten en mente los siguientes puntos:
- Solo podemos dar aquello que hemos recibido primero.
- El amor está dentro de nosotros, no afuera.
- Si queremos recibir amor, tenemos que saber cómo nos gusta recibirlo.
- Para amar a alguien debemos comprender cómo desea ser amado.
Finalmente, quiero recomendarte el libro los 5 lenguajes del amor de Gary Chapman, un libro donde se define a grandes rasgos algunos parámetros de formas de recibir amor, aunque ya dije que para la kabbalah no hay dos formas de dar amor y recibir amor que sean iguales.
Conócete y conoce a quienes amas, eso es el primer paso para amar de verdad.
Patricia Jurado U.
Directora de fundación Kabbalah Ecuador
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